Un sueño...
Una niña tibetana, con manto vino tinto, hablaba muchas lenguas que en el sueño no entendí...
Su expresión en la cara era de mucha paz... siempre sonreía. Me tomó la mano e hizo que vibrara, se sentía mucha energía. Después puso sus manos en cada uno de mis chakras, como si me estuviera sanando. Una vez terminó me dirigí a un cuarto blanco, en el cuarto habían mas personas, y del techo, caían gotas de sangre hacia el piso, era como una lluvia de sangre pero muy lenta. Cuando ella entro, por donde pasaba... la sangre del piso iba desapareciendo, hasta que todo quedaba limpio y en paz.
Un sueño extraño... un sueño con mucho significado y sabiduría.
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